El auténtico sabor del agua refresca y satisface. Pero hoy en día, disfrutar de un trago de agua puede no ser tan sencillo como llenar un vaso del grifo. Incluso tratada por un sistema municipal de agua autorizado, su calidad suele verse afectada por minerales, materia orgánica o cloro.
La ósmosis inversa es un proceso de filtración de agua. Funciona mediante presión para forzar el paso de una solución a través de una membrana, reteniendo el soluto (sólidos disueltos) en un lado y permitiendo que el disolvente tratado (agua) pase al otro lado.
Las membranas utilizadas en sistemas de ósmosis inversa cuentan con una barrera densa diseñada para permitir el paso exclusivo del agua, impidiendo el paso de solutos (como los iones de sal). Este proceso requiere una alta presión en el lado de alta concentración de la membrana.
El suavizador de agua por ósmosis inversa H3500 también reduce los contaminantes que se encuentran en el suministro de agua de un hogar, como: arsénico (pentavalente) <=50 ppb, bario, cadmio, quistes, fluoruro, cromo (hexavalente), plomo, TDS, cromo (trivalente), nitrato/nitrito, radio 226/228 y selenio.